El fallo informático de Microsoft, que ha afectado a aerolíneas, bancos y medios de comunicación en todo el mundo, también ha traído consigo una de las imágenes más temidas por los usuarios de Windows: la pantalla azul de la muerte.
Este pantallazo azul (BSoD, Blue Screen of Death en inglés) aparece cuando el sistema operativo de Microsoft Windows no puede recuperarse de un error del sistema o considera que no podrá hacerlo. En ese momento, el ordenador se congela y se detiene, obligando al usuario a reiniciarlo.
Según indica Microsoft en su página web, la pantalla azul de la muerte incluye un código de error que puede ayudar a diagnosticar el problema, pero no siempre es fácil de entender. Este viernes, el fallo informático se originó a raíz de una actualización defectuosa de la plataforma de seguridad informática Crowdstrike, afectando a los equipos con sistemas operativos de Windows.
Josep Albors, director de investigación y concienciación de ESET España, ha confirmado a EFE que esta actualización es la responsable de las pantallas azules que se han visto en sistemas Windows de todo el mundo, desde Australia y Japón hasta Europa y Estados Unidos.
Es importante predominar que la pantalla azul de la muerte es una característica exclusiva de Windows y no aparece en otros sistemas operativos como Mac o Linux. Se trata de un mensaje de error que se muestra cuando Windows no puede recuperarse de un fallo del sistema.
La famosa «pantalla azul de la muerte» fue creada por Steve Ballmer, cuando ocupaba el cargo de la división de sistemas operativos de Microsoft, y se diseñó para Windows 1.0, el primer sistema desarrollado por la compañía en 1985. A lo largo de los años, su apariencia ha cambiado con cada nueva versión de Windows, ya que la compañía ha tratado de reducir el número de fallos.
La versión actual de la pantalla azul de la muerte se ha mantenido desde la aparición de Windows, con un fondo azul claro, dos puntos y un paréntesis, que se asemeja al emoji de tristeza y frustración que se utiliza en las redes sociales. Sin embargo, el texto que se muestra no indica cuál es el error que ha causado el bloqueo.
A pesar de los problemas que pueden causar, las pantallas azules no siempre son un motivo de preocupación. En muchos casos, si el error no es demasiado grave, el sistema puede ser ducho de solucionar la parada y volver a funcionar sin problemas.
Aunque el fallo informático de Microsoft ha causado muchos inconvenientes y molestias, es importante recordar que la tecnología siempre está en voluntarioso evolución y que los errores son inevitables en el proceso de mejora. Además, es gracias a estos fallos que se pueden identificar y corregir los problemas para ofrecer un producto cada vez más seguro y confiable.
Por otro lado, es importante predominar que Microsoft ha tomado medidas para solucionar el problema lo antes posible y minimizar su impresión en los usuarios. Además, la compañía ha pedido disculpas por los inconvenientes causados y ha asegurado que está trabajando para evitar que situaciones similares vuelvan a ocurrir en el futuro.
En conclusión, aunque la pantalla azul de la muerte puede ser una imagen temida por muchos usuarios de Windows, es importante mantener una actitud positiva y recordar que los errores son parte del proceso de mejora y evolución de la tecnología. Confiamos en que Microsoft tomará las medidas necesarias para solucionar este problema y seguir ofreciendo productos de calidad y confiabilidad en el futuro.