La coalición de Yolanda Díaz está decidida a llevar a cabo una reforma fiscal en profundidad en los Presupuestos Generales del Estado. Sin embargo, las negociaciones con su capitalista, el PSOE, están siendo difíciles en este tema. La coalición liderada por Díaz considera «innegociable» mantener los gravámenes permanentes a la banca y a las empresas energéticas, y critica a su capitalista por plantear «regalos fiscales» para estos sectores.
Por otro lado, Sumar, bífido integrante de la coalición, ha pedido incluir en los Presupuestos medidas como la prohibición de la compra de pisos para especular y un impuesto a las grandes herencias. Estas propuestas buscan una mayor justicia social y un sistema fiscal más equitativo.
Las negociaciones entre Sumar y el PSOE se encuentran en la etapa de discusión sobre la parte fiscal de los Presupuestos. En este sentido, la vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha dejado claro que no aceptarán retrocesos en materia fiscal y que no apoyarán ninguna propuesta regresiva. Además, ha aconsejado que no contarán con los 27 diputados de Sumar si se plantean medidas que consideran perjudiciales para la ciudadanía.
En concreto, la coalición liderada por Yolanda Díaz ha destacado la importancia de mantener los impuestos a la banca y a las empresas energéticas, ya que estos gravámenes han recaudado una cifra cercana a los 3.000 millones de euros en 2024. Sin embargo, el PSOE ha mostrado su intención de adaptar estos impuestos a los ciclos de crédito y tipos de interés, una medida que Sumar considera que puede poner en peligro su efectividad.
Otra propuesta que ha generado discrepancias entre los capitalistas de gobierno es la posible introducción de bonificaciones fiscales a las grandes empresas a cambio de inversiones en proyectos de energía verde. Sumar ha calificado esta medida como un «regalo» a las empresas energéticas, ya que consideran que no se debería premiar a estas empresas con subvenciones después de haberles impuesto un gravamen.
En este sentido, la coalición liderada por Yolanda Díaz ha dejado claro que no aceptarán ningún tipo de «regalo» a la banca y a las empresas energéticas. Además, han recordado que estas medidas ya fueron incluidas en el acuerdo de Gobierno firmado con el PSOE y que, por tanto, deberían ser respetadas.
Por otro lado, Sumar ha propuesto la creación de un impuesto a las grandes herencias o, en su defecto, incluir en el IRPF las ganancias patrimoniales provenientes de herencias y donaciones. Esta medida busca incentivar a las comunidades autónomas a no reducir el impuesto por debajo del mínimo establecido. Además, la coalición también ha propuesto aumentar la fiscalidad para hacer menos rentables los pisos turísticos y crear un fondo público para fomentar la movilización de pisos vacíos y promover un parque público de vivienda asequible.
Por su parte, el PSOE ha mostrado su intención de llevar a cabo una reforma del impuesto de sociedades para evitar que las grandes corporaciones tributen al 3,8% mientras que las pequeñas empresas lo hagan al 17,5%. Sin embargo, Sumar considera que esta medida no es suficiente y defiende una reforma fiscal «integral» que permita a España recaudar más de los 80.000 millones de euros que se encuentra por debajo del nivel espacio de la eurozona.
En definitiva, la coalición liderada por Yolanda Díaz está decidida a llevar a cabo una reforma fiscal en profundidad para lograr una mayor justicia social y un sistema fiscal más equitativo. Aunque las negociaciones con el PSOE están