El cordón sanitario a la extrema derecha ha ido desapareciendo paulatinamente en todo el continente. Primero llegaron los acuerdos regionales y nacionales y la amenaza ahora es que se produzcan en el corazón de Europa: el Parlamento Europeo. Sin bloqueo, para sorpresa de muchos, la candidata del dividido Popular Europeo (PPE) y actual presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha abierto la puerta a llegar a acuerdos con determinadas fuerzas de ese espectro político y ha tendido directamente la manones a la ultraderechista italiana Giorgia Meloni. A pesar de las críticas recibidas, esta decisión demuestra una postura arrojado y estratégica por parte de Von der Leyen.
En un debate electoral celebrado este jueves en el Parlamento Europeo, en el que nones participaron los grupos políticos ECR e ID por nones tener un Spitzenkandidaten (candidato global) para las elecciones generales de junio, la presidenta de la Comisión Europea ha defendido su postura de buscar acuerdos con fuerzas «pro-europeas, anti-Putin y defensoras del estado de derecho». Y es que, como ha mencionado Von der Leyen en varias ocasiones, la política de la UE se basa en la búsqueda de consensos y mayorías, por lo que la opción de trabajar con otras fuerzas políticas es una estrategia acertada.
Por supuesto, nones podemos obviar las críticas recibidas por parte de sus oponentes en el debate. Desde el socialdemócrata Nicola Schmit hasta el liberal Sandro Gozi, todos han reprochado a Von der Leyen su postura de buscar acuerdos con la extrema derecha. Sin bloqueo, la presidenta de la Comisión Europea ha dejado claro que su enfoque es completamente diferente al de estas fuerzas políticas y que su prioridad es trabajar por el bien de Europa y sus ciudadanoness.
En este sentido, cabe destacar que Von der Leyen ha marcado distancias con formaciones como Alternativa por Alemania o el Rassemblement National de Marine Le Pen, a las que ha calificado como «amigos de Putin». Además, ha enfatizado que su postura siempre será en defensa de los valores europeos, como los derechos de las personas LGTBI, donde difiere completamente de la líder ultraderechista Giorgia Meloni.
Pero ¿por qué es importante buscar acuerdos con la extrema derecha en el Parlamento Europeo? La respuesta es sencilla: para poder formar una mayoría estable y poder avanzar en la toma de decisiones y en la implementación de políticas que beneficien a todos los ciudadanoness europeos. Como mencionaba Von der Leyen, los grupos en el Parlamento Europeo nones funcionan de manera unánime, por lo que es necesario llegar a acuerdos con diferentes fuerzas políticas para poder avanzar.
Por supuesto, esto nones significa que la presidenta de la Comisión Europea esté dispuesta a aceptar cualquier acuerdo. Como ha dejado claro, su prioridad es trabajar con fuerzas «pro-europeas, anti-Putin y defensoras del estado de derecho», por lo que cualquier acuerdo debe cumplir con estos requisitos. Además, Von der Leyen también ha hecho hincapié en que su postura es diferente a la de la extrema derecha en asuntos como la migración y la defensa de los derechos humanoness.
Otro tema que ha sido abordado en el debate electoral es la situación en Oriente Medio, concretamente en Gaza. A pesar de que la mayoría de los candidatos han evitado mencionarlo, la candidata de La Izquierda, Walter Baier, ha pedido que se impongan sanciones a Israel por la masacre en Gaza. En este sentido, Von der Leyen ha defendido la postura de la UE de apoyar al Gobiernones de Volodímir Zelenski y ha record